El fruto del silencio es la oracion. El fruto de la oración es la fe. El fruto de la fe es el amor. El fruto del amor es el servicio. El fruto del servicio es la paz
Mi sangre y mis orígenes son albaneses, pero soy de ciudadanía india. Soy monja católica. Por profesión, pertenezco al mundo entero. Por corazón pertenezco por completo al Corazón de Jesús
Nuestros sufrimientos son caricias bondadosas de Dios, llamándonos para que nos volvamos a Él, y para hacernos reconocer que no somos nostros los que controlamos nuestras vidas, sino que es Dios quien tiene el control y podemos confiar plenamente el Él
Nuestra idea consiste en animar a cristianos y no cristianos a realizar obras de amor. Y cada obra de amor hecha de todo corazón acerca a las personas a Dios